Los cinco miembros del gabinete de guerra del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, se expresaron a favor de tomar represalias.
Israel está evaluando responder al bombardeo masivo con drones y misiles ejecutado por Irán el sábado. El gobierno prometió que le hará “pagar el precio” al país islámico en un contexto de preocupación de la comunidad internacional, que hizo un llamado a la moderación.
Los cinco miembros del gabinete de guerra de Benjamin Netanyahu se posicionaron a favor de tomar represalias contra Irán, pero no hay consenso en cuanto al momento para hacerlo y la escala de la respuesta.
Uno de ellos, el ministro Benny Gantz aseguró que le harán “pagar el precio a Irán” por el ataque sin precedentes, el primer bombardeo directo a Israel desde ese país, pero aclaró que será en el tiempo y forma que les “convenga”. Además, planteó la necesidad de construir una “coalición regional” contra su rival.
En la noche del sábado, Irán lanzó en total 170 drones, más de 30 misiles de crucero y más de 120 misiles balísticos. Según Israel el 99% de los misiles fueron interceptados con ayuda de Estados Unidos, Jordania y otros aliados.
Mientras tanto, en Teherán reivindicaron que “el ataque logró todos sus objetivos” y aseguró que asestaron “duros golpes” a la base del Néguev, mientras que el presidente Ebrahim Raisi advirtió que cualquier respuesta “temeraria” de Israel supondría una respuesta militar “decisiva y mucho más fuerte”.
Los líderes de las potencias económicas y democráticas del G-7 condenaron el bombardeo iraní, mientras la disputa regional se trasladaba también a la sede de la ONU, en Nueva York, donde Israel pidió en el Consejo de Seguridad que se castigara a Irán con “todas las sanciones posibles”.